Participación ciudadana en la era digital
CÓMO LOS ECOSISTEMAS DE INNOVACIÓN FOMENTAN LA PARTICIPACIÓN CIUDADANA A TRAVÉS DE TECNOLOGÍAS EMERGENTES

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) elaboró un informe para analizar cómo Portugal, España y los Países Bajos utilizan sus ecosistemas de innovación para fortalecer la participación ciudadana. El estudio examina buenas prácticas, desafíos y recomendaciones que deben considerar los gobiernos y actores clave que buscan promover procesos más inclusivos y transparentes.
DEFINICIONES CLAVE
Participación ciudadana
Hace referencia a todas las formas en que los actores interesados, incluidos los ciudadanos, pueden intervenir en el ciclo de formulación de políticas públicas, así como en el diseño y la prestación de servicios.
Tecnologías emergentes
En el presente estudio, las tecnologías emergentes no se definen mediante una lista específica, sino que se comprenden a través de cinco dimensiones: legal, política, social y experiencial, económica y técnica.
Ecosistemas de innovación
Red de colaboración integrada por actores del sector privado, el gobierno, las organizaciones de la sociedad civil y las instituciones de investigación que trabajan juntos para desarrollar nuevas tecnologías, productos o servicios que abordan objetivos específicos comunes.
EXPERIENCIA POR PAÍS
Portugal
Portugal ha sido pionero en materia de participación ciudadana desde 1974. Iniciativas como el presupuesto participativo nacional y plataformas digitales como participa.gov reflejan su compromiso.
Sin embargo, enfrenta desafíos importantes como la disminución de la confianza ciudadana y las habilidades digitales limitadas de su población.
El ecosistema portugués está compuesto por agencias públicas, municipios, organizaciones civiles y centros académicos. No obstante, las iniciativas se encuentran fragmentadas y carecen de una coordinación nacional efectiva.
Actores clave
- Sector público: Una agencia pública lidera la estrategia nacional y la operación de plataformas digitales, mientras que los municipios son los principales ejecutores.
- Sector privado: Empresas y startups tecnológicas ofrecen soluciones específicas, aunque su presencia aún es limitada. Academia: Universidades y centros de investigación impulsan conocimiento técnico y ético sobre IA y blockchain.
- Sociedad civil: Organizaciones trabajan en la inclusión digital y la promoción de la participación comunitaria.
Principales necesidades
Definir una estrategia nacional clara, garantizar financiamiento sostenible y fortalecer la comunicación pública sobre los resultados de la participación.
España
Desde su transición democrática, España ha desarrollado una sólida cultura participativa. Herramientas como Decidim y Consul han sido referentes internacionales en innovación democrática.
Su ecosistema de participación es dinámico pero fragmentado, con una fuerte presencia de municipios y organizaciones civiles, así como redes que promueven la colaboración, aunque falta mayor coordinación a nivel nacional.
Actores clave
- Sector público: Gobiernos locales lideran los procesos de participación, mientras las entidades nacionales promueven innovación y capacitación.
- Sector privado: Empresas y consultoras apoyan el diseño y ejecución de procesos participativos, aunque enfrentan barreras regulatorias y desafíos en contrataciones públicas.
- Academia: Las universidades contribuyen con investigación aplicada y transferencia de conocimiento.
- Sociedad civil: Organizaciones desarrollan plataformas tecnológicas y vigilan la transparencia y rendición de cuentas.
Principales necesidades
Mejorar la coordinación nacional, establecer estándares éticos para el uso de tecnologías, y fortalecer la cultura participativa en las administraciones públicas.
Países Bajos
Los Países Bajos tienen una larga tradición de consenso y participación, aunque en los últimos años se ha observado una creciente polarización social y disminución de la confianza institucional.
El ecosistema neerlandés destaca por su colaboración sólida entre gobierno, empresas, academia y sociedad civil. Universidades y plataformas tecnológicas trabajan estrechamente con gobiernos locales y startups.
Actores clave
- Sector público: Municipios lideran iniciativas de co-creación ciudadana.
- Sector privado: Empresas y startups desarrollan herramientas tecnológicas para la participación.
- Academia: Universidades impulsan investigación aplicada y establecen marcos éticos.
- Sociedad civil: Organizaciones aseguran la inclusión y la transparencia en los procesos.
Principales necesidades
Ampliar las capacidades técnicas en las administraciones públicas y garantizar que la innovación tecnológica no excluya a los grupos vulnerables.
CONCLUSIONES
El análisis de los casos de Portugal, España y los Países Bajos demuestra que los ecosistemas de innovación son fundamentales para fortalecer la participación ciudadana a través de tecnologías emergentes. La colaboración efectiva entre gobierno, academia, empresas y sociedad civil es esencial para construir procesos más inclusivos, eficientes y transparentes.
A pesar de los avances, persisten desafíos comunes en los tres países:
- La necesidad de una dirección estratégica clara a nivel nacional.
- El aseguramiento de un financiamiento sostenible.
- El fortalecimiento de capacidades institucionales.
- La mejora de la comunicación pública hacia la ciudadanía.
Fortalecer estos factores permitirá a los gobiernos impulsar procesos participativos más sólidos, que a su vez ayudarán a recuperar y consolidar la confianza ciudadana en la democracia.
Bibliografía:
OECD (2025), How Innovation Ecosystems Foster Citizen Participation Using Emerging Technologies in Portugal, Spain and the Netherlands, OECD Public Governance Reviews, OECD Publishing, Paris, https://doi.org/10.1787/2cb37a30-en.